Un momento de felicidad

Un momento de felicidad

Es un día normal, bajo la lluvia. Espero el semáforo verde para cruzar la calle, el rojo difumina su luz entre las gotas. Estos segundos de espera parecen horas, pienso o más bien me olvido de mí misma tragada por el ambiente del alrededor. 

Son las ocho de la tarde aproximadamente, se puede aprovechar un ambiente tranquilo característico de los días lluviosos. Los pocos coches que quedan en la calle aún en funcionamiento se sienten olvidados. El ruido es absorbido por el agua en el momento del roce entre ruedas y hormigón. Yo sigo esperando mientras aprovecho estos momentos de calma para escuchar la lluvia. Su sonido apacible viene acompañado de un olor único y fresco que quiebra mi conciencia paulatinamente haciéndome caer en un estado de trance. Observo el idílico panorama5 que se vislumbra ante mí. 

Dejo ir todo ese estrés acumulado durante la semana, el dulce vacío me invade. El silencio de la humanidad en este momento es mi mejor compañía. El anochecer es más oscuro que de costumbre y el paraguas me cubre como si fuera mi diminuto refugio en esta gigantesca tierra. 

El tono rojizo del semáforo cambia al verde, ya me toca pasar pero sigo sin dejar mi estado de sueño consciente. A las pocas calles me detengo delante de una puerta, ésta tiene luz. Más adelante se encuentra mi hogar, el único sitio donde siento que pertenezco completamente, mi familia me espera mientras cuentan lo ocurrido en el día. Sigo sin moverme durante unos segundos para aprovechar el momento de tregua entre mi cuerpo y mente. 

Abro la puerta, la luz es más intensa que antes, oigo voces sinceras que resuenan como una melodía en mi oído. Solo he necesitado 10 segundos, 10 segundos para que mis órganos internos en el olvido rebosen de bienestar y alegría. A los 20 segundos los rostros que más añoro durante el día aparecen ante mí. Estudio el momento al máximo detalle para conservar este recuerdo por el resto de mi vida, para los momentos tristes, momentos de desesperación o momentos difíciles. 

En mi opinión son estos momentos que te permiten continuar existiendo, que te mantienen sana tanto mentalmente como físicamente. Es lo que yo considero lo más parecido al paraíso. Ver las sonrisas sinceras que transmiten tanta bondad que solo ves en las personas que más amas es lo que te hace olvidar de los problemas del universo para llevarte a los puntos más altos de la felicidad. 

Lluïsa, 15 años

4 pensaments sobre “Un momento de felicidad

Deixa un comentari